BEIJING, 17 oct (Xinhua) — China se ha convertido en un estabilizador y motor cruciales para la economía mundial, ya que su transformación ecológica y sus avances en innovación aportan un valor significativo, señaló una funcionaria del Buró Nacional de Estadísticas (BNE). «A pesar de un entorno externo complejo y rápidamente cambiante durante el período del XIV Plan Quinquenal (2021-2025), la economía de China ha mantenido un crecimiento estable, lo que sirve como un importante impulso para la incierta economía mundial», indicó Wang Guanhua, funcionaria del BNE, en el episodio más reciente de la Mesa Redonda Económica de China, un programa multimedia de entrevistas presentado por la Agencia de Noticias Xinhua. Señaló que la tasa de crecimiento económico promedio anual de China fue de 5,5 por ciento entre 2021 y 2024, situándose entre las más rápidas entre las principales economías del mundo. El país, de manera notable, contribuyó con alrededor de 30 por ciento del crecimiento mundial en promedio anual durante este período. Wang también destacó el liderazgo de China en términos de la transición ecológica mundial. Afirmó que las fuentes de energía limpia representan ahora un tercio del consumo eléctrico del país. En 2024, el consumo energético por unidad del producto interno bruto (PIB) de China fue 11,6 por ciento inferior al de 2020, lo que la sitúa entre los líderes mundiales en la reducción de la intensidad energética. China ha consolidado su posición como potencia mundial en materia de innovación. El país entró este año en el top 10 del Índice Global de Innovación, convirtiéndose en uno de los innovadores de más rápido crecimiento del mundo en la última década, expresó Wang. Los avances en industrias emergentes como la inteligencia artificial, la robótica y los productos biofarmacéuticos están impulsando a China en la cadena de valor mundial, añadió. Fin
