BEIJING, 11 dic (Xinhua) — Un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China dijo hoy miércoles que respecto a la llamada «iluminación del radar», fue la parte japonesa la primera en realizar un acoso deliberado y después difundir desinformación, y la parte japonesa es la provocadora responsable de orquestar esta maniobra política, por lo que debe asumir todas las responsabilidades. El portavoz Guo Jiakun indicó en una conferencia de prensa diaria que los medios de comunicación chinos han publicado datos de audio y detalles relevantes del llamado problema de la «iluminación del radar», que muestran que los hechos son muy claros. Indicó que los ejercicios y entrenamiento de China en las aguas y el espacio aéreo pertinentes cumplen plenamente con el derecho internacional y la práctica internacional, y agregó que las maniobras de China son profesionales, convencionales, seguras, moderadas e irreprochables. «Ayer, la parte japonesa afirmó no haber recibido notificación previa del ejercicio de vuelo de China. Hoy, admitió haber recibido la información con antelación. Además de esa inconsistencia, la parte japonesa sigue evadiendo el asunto sin explicar por qué envió aviones de guerra a las zonas de ejercicios anunciados previamente por China y realizó repetidas vigilancia hostil y maniobras disruptivas para crear una situación de crisis y generar revuelo mediático. ¿Intenta la parte japonesa desviar la atención y engañar a la comunidad internacional?», preguntó Guo. China espera que la comunidad internacional pueda mantener la visión clara y no se deje engañar por la parte japonesa, expresó Guo, y señaló que los aliados de Japón en particular necesitan permanecer en alerta máxima y no dejarse engañar por la parte japonesa. El portavoz agregó que la parte japonesa debe afrontar las causas reales de las dificultades actuales en las relaciones China-Japón, hacer un serio examen de conciencia y corregir sus errores, así como retractarse de las declaraciones erróneas de la primera ministra Sanae Takaichi sobre Taiwán, como es debido.
